La música nos excita, nos eleva, nos hace soñar, nos estremece… Sentirla es fácil, pero comprender cómo logra extraer tantísimo de nosotros es reducto de la neurociencia más avanzada. Y ello porque la actividad musical, en el ser humano, pone a trabajar casi todas las regiones conocidas del cerebro. Levitin fue productor musical antes que neurólogo y aquí recurre tanto a Mozart como a los Beatles para descubrir cómo se gestan nuestras preferencias; qué determina el don para la música o por qué este placer sin utilidad aparente es capaz de desenterrar recuerdos.
Autor Daniel J. Levitin.
Editorial RBA.
Datos 346 páginas, 22 euros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario